Zonas de trabajo (I): en esquina

Zonas de trabajo (I): en esquina
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La mayoría de nosotros tenemos la necesidad de crear una pequeña zona de trabajo en nuestro hogar, ya sea para nosotros, porque bien necesitamos llevarnos algo de trabajo a casa o simplemente trabajamos por nuestra cuenta y hacemos de nuestra casa también nuestro despacho, o para otros miembros de nuestra familia, como por ejemplo los niños, para los que se vuelve imprescindible para el estudio un pequeño rincón de estudio con unas condiciones adecuadas.

Lo que quiero decir es que la zona de trabajo en la mayoría de las casas es inevitable, aunque en la mayoría de los casos debido a los problemas de espacio su presencia se ve limitada a un pequeño rincón dentro de un salón o dormitorio.

Por eso, por su necesidad, y porque es una de las zonas de nuestra casa donde con mayor motivo necesitamos estar cómodos y optimizar el espacio al máximo he decidido hacer una serie de post con tipos de distribución de zonas de trabajo y algo de inspiración a la que poderle sacar partido si estáis pensando en crear un nuevo "despacho" en vuestra casa.

Puertas abiertas: un despacho estrecho

Para empezar vamos a hablar de las zonas de trabajo en esquina como la que os traigo en las imágenes de hoy. Es ideal para aquellos que tengan que utilizar el espacio sobrante de una habitación como despacho, como el de un dormitorio, de manera que utilizamos una esquina que de otra manera igual hubieramos desaprovechado.

También está muy bien para aquellas habitaciones estrechas, por ejemplo las habitaciones de los niños, donde una sola pared es a veces insuficiente.

La idea es distribuir la zona de trabajo en una especie de L, utilizando la esquina de la habitación. De esta manera utilizaremos el ancho de dos paredes y además ganaremos una zona de más profundidad, la de la esquina, perfecta para colocar el ordenador o simplemente para un archivador que sea un poco más grande. En la imagen como veis se ha utilizado para el ordenador, aprovechando así la mayor anchura de este rincón.

Las ventajas de este tipo de zona de trabajo son, además de aprovechar ese rincón del que hablábamos que quedaría de otra forma desaprovechado, el hecho de que permite crear dos frentes de trabajo, uno en cada segmento de nuestra L, de manera que a la hora de realizar varios trabajos será mucho más cómodo.

Una silla de ruedas es lo único que necesitaremos para movernos cómodamente entre ellas, además al utilizar la pared como fondo de la estructura podemos optar por mesas ligeras evitando sobrecargar demasiado la habitación con estructuras pesadas.

Puertas abiertas: un despacho estrecho

La zona de almacenamiento, archivadores y estanterías tiene dos posibilidades, la primera es colocarlas a modo de librería como se ve en la imagen, la otra quizás un poco más arriesgada e incómoda porque supone tener que levantarnos continuamente, es colocar armarios o pequeñas repisas en la parte superior.

Imágenes vía | Unplggd En Decoesfera | El despacho de Tamara Falcó, Crea tu despacho en la buhardilla

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