Calentador a gas o termo eléctrico. Con cúal me quedo

Calentador a gas o termo eléctrico. Con cúal me quedo
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Ahora que se aleja el verano y el frío se instala poco a poco en nuestras vidas, el agua caliente se convierte en una de esas cosas que no pueden faltar en casa.

Salvo aquellos que tienen calefacción central y la caldera se encarga también de calentar el agua, al resto se nos ha planteado alguna vez el dilema de qué nos conviene más, un termo eléctrico o un calentador a gas.

Ninguno de las dos opciones es significativamente mejor que la otra, así que la elección dependerá de como se adapten la ventajas e inconvenientes de cada sistema a las necesidades de cada uno. Y eso es lo que vamos a tratar de averiguar ahora.

El termo eléctrico

Termo eléctrico

El funcionamiento del termo eléctrico es muy sencillo. Explicado someramente, se trata de un tanque de agua de dimensiones nada despreciables (50-100 litros) en cuyo interior una resistencia eléctrica se encarga de calentar el agua.

Una vez alcanzada la temperatura, la resistencia se apaga y el aislamiento del tanque se encarga de que ésta no se enfríe demasiado rápido. Cuando la temperatura del agua baja, bien por el paso del tiempo o porque se usa el agua caliente y entra agua fría, la resistencia vuelve a entrar en funcionamiento.

Su mayor carencia es la poca velocidad a la que es capaz de calentar el agua y que lo convierte en inviable si se pretende hacer un uso intensivo, como por ejemplo, que se duchen varias personas seguidas.

Ventajas

  • No hace falta instalación de gas

  • El agua sale caliente nada más abrir el grifo

  • La temperatura del agua es constante

  • Funciona para cualquier caudal de agua, por pequeño que sea

Inconvenientes

  • Ocupa un espacio significativo

  • Cuando se acaba el agua caliente, tarda en volver a calentarla

  • La electricidad no es barata

  • Si el tanque se estropea, puede inundar la casa

El calentador a gas

Calentador a gas

También conocido como calentador instantáneo ya que calienta el agua en el momento en el que esta va a ser utilizada aunque, irónicamente, ésta se toma su tiempo en salir caliente del grifo.

Su funcionamiento también es de lo más sencillo, un serpentín de agua pasa por encima de una retahíla de fogones que se encargan de calentarla. Estos fuegos se encienden únicamente cuando se abre el grifo del agua caliente y ésta empieza a circular.

Su mayor defecto radica en que, aunque se puede regular manualmente la potencia de los fuegos, una vez fijada, esta no varía sea cual sea el caudal y la temperatura del agua que llega de la red, por lo que la temperatura a la que nos llega depende del frío que haga fuera y también de si abrimos más o menos el grifo o alguien tira de la cadena, provocando algún que otro susto en forma de agua hirviendo o helada.

Existen calentadores instantáneos eléctricos, pero su alto consumo y la potencia eléctrica que necesitan los hace poco aconsejables excepto para casos muy puntuales.

Ventajas

  • La cantidad de agua caliente es ilimitada

  • El gas el más económico que la electricidad

Inconvenientes

  • La temperatura del agua puede variar inesperadamente

  • El agua tarda un rato en salir caliente

  • Necesita un caudal mínimo de agua para funcionar

  • La instalación necesita más revisiones

  • El gas y su combustión es potencialmente más peligroso

  • Si se usa butano y no gas natural, hay que estar pendiente de tener bombonas de recambio

Conclusiones

Como ya os adelanté, ninguno de los dos sistemas es claramente mejor que el otro, por lo que la decisión a la hora de elegir un calentador o un termo eléctrico depende principalmente del uso que se le vaya a dar.

En mi opinión, para una casa donde vivan dos o tres personas, un termo eléctrico mediano es suficiente salvo que les encante pasar mucho tiempo bajo el agua o gasten mucha agua fregando. Si además la encimera es de vitrocerámica, con más motivo, pues así no tenemos que poner gas en casa.

Sin embargo, para una pareja con hijos o un piso compartido, el calentador a gas se vuelve prácticamente imprescindible salvo para aquellos capaces de organizarse mucho o bien que se laven como los gatos.

Vosotros que preferís ¿Calentador a gas o termo eléctrico?

Foto | Stevendepolo en Flickr y Junkers
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